El precinto de plomo es ideal para asegurar contenedores garantizando que estos permanezcan cerrados durante el traslado hasta su destino final ya que cuando el precinto se retira este no se puede volver a colocar. El sello de seguridad de plomo cuenta con un número de serie único que verifica su validez, de modo que si este se encuentra en perfectas condiciones indica que la mercancía no fue manipulada ni alterada.